Gastronomía
Las legumbres son las semillas contenidas en la vaina de plantas de la familia de las leguminosas, y aportan, en cantidad y calidad, nutrientes fundamentales para nuestro cuerpo. Del reino vegetal, son las que ofrecen mayor porcentaje de proteínas. Con los cereales, las legumbres son la otra familia con el potencial de acabar con la desnutrición en nuestro planeta. Veamos qué contienen:
Un colombiano consume en promedio al año 19,3 kg de carne de res, 29,5 kg de pollo, 7,18 kg de cerdo y 6,1 kg de pescado. Con la tierra necesaria para producir un kilo de carne de res, se podrían sembrar 160 kg de papa o 200 kg de tomate. Un kilo de carne genera un gasto de 15.300 litros de agua (8 meses de duchas de 5 minutos) mientras que una papa requiere 25 litros, y un tomate, 13 litros. Un kilo de carne de res consume entre 10 y 16 kg de cereales; un kilo de carne de cerdo requiere 4 kilos de cereal; un kilo de ave, 3 kg.
Hace más de 3.600 millones de años se cree que ya existían formas de vida fotosintéticas, es decir con la habilidad de convertir la luz solar en energía para vivir. Pero no fue sino hasta 1913 que el doctor Richard Willstätter, ganador del premio Nobel, descubre las importantes propiedades de este pigmento verde.
Las semillas son el origen de la vida vegetal, las plantas, por esto no limitan esfuerzos para generarlas y llenarlas de nutrientes, vitaminas, minerales, proteínas y aceites esenciales. Son un abundante e ideal alimento para meriendas altamente nutritivas.
El mundo de las infusiones es maravilloso, al pensar en estas me siento como Jean-Baptiste Grenouille en el evanescente reino de los olores, ya que técnicamente podemos hacer una infusión de casi cualquier cosa. Actualmente están de moda en el mundo debido a sus propiedades medicinales, a sus exóticos sabores y a su fácil consumo. Es más, la bebida más consumida en Colombia es una infusión: nuestro querido café. Y la bebida más consumida en el mundo es otra infusión: el té.
Después de una gran visita a la capital de Perú, para asistir al famoso festival gastronómico Mistura y a la premiación de los 50 mejores restaurantes de Latinoamérica, vengo a contarles algunas enseñanzas que me fueron transmitidas de una de las culturas gastronómicas más reconocidas del mundo.
Galletas de arroz, brownies de quinua, tortas de garbanzo, son solo algunos de los ejemplos de harinas que reemplazan la de trigo en panes, tortas, postres y galletas. Y están de moda, no solo porque son muy comunes entre los veganos y naturalistas, sino porque le aportan a los platos sabores distintos y originales.
Además, son totalmente recomendados para quienes tienen alergia o intolerancia al gluten, comúnmente conocida como la proteína del trigo, y que les obliga a eliminar este ingrediente de sus dietas.
Yo, afortunadamente, por ser cocinero no sufro del cotidiano problema de no saber qué almorzar en la oficina. Mi oficina es la cocina. Y tampoco tengo el problema de terminar el almuerzo y llegar a la oficina con tanto sueño que mi productividad se vea disminuida en un 70 por ciento. En vista de las recurrentes preguntas en mi blog ‘5 Sentidos’ sobre el tema, finalmente mi curiosidad me pudo y empecé a investigar sobre el asunto.
Del 18 al 21 de septiembre
Más información en www.gastronomicopopayan.org
O en corpgastronomicapopayan@gmail.com
En este importante evento gastronómico será homenajeado el chef belga Francois Cornelis que con una larga trayectoria ha logrado mantener el nombre de su restaurante, –La Cigalle– y posicionarlo como uno de los mejores del país.
Siempre me he preguntado por la importancia de la cocina de las abuelas: ¿por qué no se habla de la cocina de las tías o de los primos? ¿Por qué se habla de la cocina de mamá con más emoción, pero queda claro que es jerárquicamente inferior? Y por último: ¿todas las recetas de la abuela pasan a ser recetas de la abuela?