26 de diciembre del 2024
Fotos Camilo Devis
4 de Febrero de 2013
Por:

Este tema lo hemos tocado indirectamente en algunas ediciones pasadas, y sé que ninguno de nosotros es indiferente a lo que se refiere a la comida que genera confort. El año pasado, hablando sobre el sentimiento universal de depresión que generan las seis de la tarde, sobre todo en las ciudades, en esta sección escribí sobre algunas soluciones que pueden venir de la comida y de nuestra alimentación desde el punto de vista nutricional y químico.

Por Alejandro Cuéllar

‘Comfort food’: La comida de la felicidad

Pero estas soluciones son sólo la punta del iceberg que representa a la comida de confort.

Hay cuatro categorías dentro de lo que podemos llamar comfort food: la primera es la comida que nos genera confort físico: a través de platos saludables pero deliciosos nos hace sentir sanos y felices. La segunda es la que nos genera confort nostálgico: a través de la evocación de la infancia, personas queridas, nuestro país de origen o simple recuerdos alegres; la llamada ‘cocina de mamá’, que nos hace pensar que todo en el mundo va a estar bien, así sea por un instante. La tercera es la comida de indulgencia, conformada por todos los alimentos o platos que nos encantan pero que nos hacen sentir culpables cuando los consumimos, como los chocolates, el helado, la tocineta, las hamburguesas, la pizza, etc. La cuarta y última categoría es la de confort por conveniencia: alimentos de fácil acceso, como los que se consiguen congelados para microondas, la comida enlatada o la rápida.

Un estudio sobre el tema realizado en Nueva York por la Universidad de Cornell nos muestra que, a diferencia de lo que uno pensaría, los seres humanos no tendemos a consumir este tipo de alimentos para sentirnos bien cuando nos encontramos en un mal estado de ánimo. Curiosamente, sólo un 36% de los entrevistados dijo consumirlos cuando estaba deprimido. Se descubrió, entonces, que el 86% de los entrevistados consumía comfort food cuando se sentía feliz, a modo de recompensa. Eso sí, el profesor Brin Wansink, encargado de esta investigación y titular del laboratorio de comida y marcas de esa universidad, dice que más del 60% de esta variedad no es saludable. Y un dato más: las preferencias dentro de la comfort food cambian drásticamente según los sexos. Mientras que las mujeres siempre tienden a escoger pasabocas o postres, como helados, chocolates y galletas, los hombres se inclinan más hacia platos fuertes como pizzas, pastas y sopas.

Como esta comida es muy personal, traté de darles gusto a todos con platos sencillos que les gusten a unos y a otros.
Sé que el postre siempre sale al final, pero estoy seguro de que los hombres también van a disfrutar de esta receta, que pensé específicamente para las mujeres. ¡Las damas primero!

Empanaditas de Milky Way

Ingredientes para 6 personas

3 barras de Milky Way
6 hojas para rollito primavera (se consiguen en cualquier tienda de comida asiática)
1 huevo
1 litro de aceite

Preparación

    

Corte la barra en cuatro para que queden cuadrados de chocolate. Después corte una hoja para rollito primavera en dos para que queden rectángulos. Ponga el chocolate en la base de uno y dele dos vueltas al chocolate. Moje con huevo y doble los bordes de la hoja. Moje de nuevo con un pincel y siga enrollando. Deje reposar por diez minutos en la nevera.
Frítelos en abundante aceite hasta que queden dorados. Termine espolvoreando con azúcar impalpable o cacao.

Pero no crean que me he olvidado de los hombres: este plato, además de estar enfocado a nuestra indulgencia, me recuerda la diferencia entre el sánduche que me daban apenas llegaba del colegio y el que mi mamá hacía llena de amor cundo se acercaba ―no muy a menudo― a la cocina. Como buena francesa que era, llenaba los panes de mostaza Dijon; yo, por tratar de imitarla, ponía la misma cantidad, lo que me hacia llorar incontrolablemente. Pues bien, esta es la misma receta, obviamente bajando la dosificación de mostaza, y cambiando el jamón normal por un saludable jamón de pavo, para contrarrestar la indulgencia de la tocineta.

Sánduche grillado de queso holandés con jamón ahumado de pavo, tocineta y mostaza Dijon

Ingredientes para 5 persona

10 tajadas de pan integral
10 láminas de jamón ahumado de pavo (o cualquiera)
20 lonjas de tocineta ahumada
10 lonjas de queso holandés
1 tarro de mostaza Dijon
200 gr. de mayonesa
125 gr. de mantequilla
Variedad de lechugas (preferiblemente amargas, como la rúgula)
Vinagre balsámico
Aceite de oliva
Sal y pimienta

Preparación

Para empezar con la tocineta, ponga las lonjas separadas sobre una toalla de papel de cocina. Ponga el papel sobre un plato. Sobre la tocineta disponga otra lámina doble de papel de cocina y encima otro plato. Lleve al microondas por un lapso de cinco minutos. Revise si ya está crocante; si no lo está, ponga un minuto más. Repita el proceso hasta que quede totalmente crocante.

Para el sánduche, ponga una tajada del pan integral y cúbrala con mostaza Dijon, encima coloque dos láminas de jamón de pavo, dos lonjas de queso holandés, cuatro lonjas crocantes de tocineta y termine con otro pan con mayonesa, sal y pimienta. Ponga mantequilla en una parrilla o sartén y dore el pan a fuego medio.

Para la ensalada, haga una vinagreta con una cucharada de mostaza Dijon, tres cucharadas de vinagre balsámico, sal, pimienta y seis cucharadas de aceite de oliva. Lave las lechugas, seque bien y agregue la vinagreta justo antes de servir para que no se ablanden las hojas.

Sirva el sánduche con la ensalada encima, decorando con gotas de vinagreta.

Terminemos con algo para todos: una sopita de tomate que era y sigue siendo la preferida de mi padre. Además de deliciosa, es saludable como ella sola: perfecta para los días lluviosos o para un domingo cualquiera. A continuación, les regalo mi receta de la clásica sopa de tomate con un pequeño aditamento para sofisticarla.

Sopa de tomate con tostón de tomate y albahaca

Ingredientes para 5 persona

1,5 kilos de tomate chonto
1 cebolla cabezona pequeña
1 cebolla morada
2 atados de albahaca
1 baguette
100 ml. de crema de leche
Aceite de oliva
Sal y pimienta

Preparación

Comience cortando un kilo de tomates por la mitad, y la cebolla en cuatro, licue todo con un poco de agua (solamente lo necesario para que quede líquido, es importante no licuar demasiado para que no se rompan las semillas). Pase todo por un colador para retirar las semillas y la piel, ponga en una olla, salpimiente y cocine por veinte minutos con uno de los atados de albahaca. Al pasar este tiempo, pruebe: si está ácida, puede seguir cocinando con un poco más de agua, o agregue una cucharadita de azúcar. Al final, rectifique sazón.

Aparte, corte láminas muy delgadas de pan en diagonal para que queden largas, póngalas en una bandeja para horno y moje con un chorrito de aceite de oliva, sal y pimienta. Hornee a 200 grados centígrados hasta que queden tostadas y crocantes.

Corte en cuatro los tomates que quedan y quíteles las semillas. Corte los gajos en cubos de medio centímetro y la cebolla morada en cubos del mismo tamaño, y mezcle todo. Salpimiente y agregue aceite de oliva. Termine con unas hojas de albahaca picadas.

Para servir, ponga la sopa hirviendo en un plato hondo y una cucharada de la ensalada de tomate en la tostada encima de la sopa. Termine con un chorro de crema sobre la sopa, gotas de aceite de oliva, pimienta y hojas de albahaca.

De restaurantes
Por Crepe Suzette

María Antonia

Ubicado en el Centro Internacional bogotano, muy cerca de las oficinas y bancos del sector, y a sólo pasos del Museo Nacional, María Antonia, especializado en pastelería, repostería y café, es el lugar perfecto para los que quieran sentarse a conversar o a leer mientras se llevan a la boca delicias inimaginables.

Para recomendar: los brioches de arequipe ($3.000), los brownies ($3.800) y la obsesión de chocolate ($6.000), que es la más increíble de las tortas. Cualquiera de estas ricuras, acompañada de un buen café.

A la hora de almuerzo, ofrecen sánduches; los hay de pollo, roastbeef, jamón dulce, hongos y tres quesos, y todos están buenísimos. Tal vez lo único criticable son las no muy buenas papas fritas que los acompañan cuando se piden en combo (¡qué buenas serían unas papas a la francesa!). Recomiendo pedirlos, entonces, acompañados de ensalada verde.

¿Mi almuerzo ideal? Un sánduche de pollo (con pimientos asados y pesto), que en combo (gaseosa, y papas o ensalada) vale $15.500, y una obsesión de chocolate. Le aseguro que querrá volver.

Precio de los postres: entre $4.200 y $6.000.
Dirección: Calle 30 No. 6-44, Bogotá.
Teléfono: 3404580