Las enseñanzas de Susan Sarandon en Cartagena

En su primera noche en Cartagena, Susan habló de paz, política y activismo. El encargado de entrevistarla durante su tributo, en el teatro Adolfo Mejía, fue el periodista Alejandro Santos, director de la Revista Semana. Con él, la conversación se centró en sus ideas, en su forma de entender el mundo. Cuando le preguntaron si ella creía que los actores debían involucrarse en la política, respondió, primero y entre risas, que se sentía hablando con un americano. Luego, y con un tono más serio, explicó que la posición de privilegio en la que se encuentran algunas celebridades como ella, debe ser utilizada para luchar por el bien. Dijo que, aunque en teoría esa debía ser la misión de los periodistas, ellos no hacen su trabajo. “Los periodistas son quienes supuestamente deben contar la verdad. Pero lo olvidaron”, afirmó y argumentó que en esa medida, su influencia como una figura pública se convierte en necesaria para la sociedad.
“¡Wow! Es genial ver que, en efecto, esto sea una mujer”, dijo al final de la noche cuando le entregaron el premio India Catalina.
Al día siguiente, en su clase magistral, Susan confesó que lo primero que hace, antes de decidir si acepta un personaje o no, es entender qué quiere contar el director con su historia. Usualmente no lo entiende por sí misma, y se los pregunta. “Y ustedes no se imaginan lo bueno que resulta como filtro, porque muy pocos directores pueden responder a esa pregunta”.
“Eso es como si me preguntaras por la diferencia entre masturbarse y hacer el amor”, respondió cuando le preguntaron si prefería hacer cine o teatro.
“En las películas, la actuación es un conjunto de pequeños momentos, no importa si estás construyendo un personaje porque el editor, en últimas, lo destruirá, mientras que en el teatro es todo lo contrario”, agregó.
También aconsejó a quienes hacen parte de la Asociación Colombiana de Actores, sindicato que busca reformar las condiciones laborales de quienes ejercen su profesión, “Todo lo que vale la pena es muy difícil. Extremadamente difícil. Pero no por eso hay ‘tirar la toalla’ ”.
Y, por supuesto, lanzó una ‘pildorita’ hacia el final de la clase, sobre su tendencia política: “Parece que América carece de autenticidad. Por eso va hacia el radicalismo de Trump, diciendo cualquier cantidad de tonterías. Por el otro lado está Sanders, quien surgió sin tomar dinero de nadie ni asociarse con las organizaciones que están arruinando al mundo”.