UN ARQUITECTO, UNA OBRA: THOMAS REED Y EL CAPITOLIO NACIONAL
El conocimiento cierto de los lugares de nacimiento y de fallecimiento de Thomas Reed fue a lo largo del siglo XX objeto de versiones contradictorias. Este problema se aclaró con el hallazgo de su tumba en el cementerio de Guayaquil. En ella se registra que Reed nació el 12 de diciembre de 1817 en la isla de Tortola, actual capital de las Islas Vírgenes Británicas y que falleció en Guayaquil el 26 de enero de 1878, a los 61 años de edad[1].
Thomas Reed trabajó como arquitecto e ingeniero en Venezuela, Colombia y Ecuador entre 1843 y 1878. Reed arribó a Venezuela en 1843 y en 1846 fue llamado por el presidente Tomás Cipriano de Mosquera para levantar el plano de un “palacio de Gobierno” en Bogotá y servir como Director Superintendente de Obras Públicas en la capital y sus alrededores. Hacia 1860 emigró al Perú y luego al Ecuador donde ocupó el cargo de “arquitecto de la nación” hasta 1874 dejando un legado importante de obras de arquitectura e ingeniería.
En Colombia, la valoración de Reed como arquitecto se debe principalmente a dos de sus obras: el Capitolio Nacional y el antiguo Panóptico de Cundinamarca, hoy Museo Nacional. Del primero no existen planos originales, solo hay reconstrucciones hipotéticas, y del segundo hay algunos planos firmados por Reed en el Archivo General de la Nación.
Alberto Corradine Angulo elaboró una reconstrucción de “la planimetría prevista por Reed” para el Capitolio basada, a su vez, en el plano preparado por Pietro Cantini en 1906. Esta reconstrucción, que puede asumirse como la más cercana a la intención original, reúne la mayor parte de las ideas puestas en palabras por Reed en su informe al Congreso. El plano muestra un edificio de planta simétrica, con un pórtico central que separa el patio principal de la plaza de Bolívar, formado por tres hileras paralelas de seis columnas jónicas cada una. Siete patios dispuestos simétricamente permiten iluminar y ventilar todos los recintos. Dos antecuerpos sobresalen en los costados oriental y occidental[2]. A pesar de varias intervenciones, el Capitolio conserva su carácter de obra maestra de la arquitectura neoclásica del siglo XIX en Colombia.
[1] Saldarriaga, Alberto; Pinzón, Alexander y Ortiz, Alfonso. En Busca de Thomas Reed. Arquitectura y política en el siglo XIX. Bogotá, Instituto Distrital de Patrimonio Cultural, 2017.
[2] Corradine Angulo, Alberto. Historia del Capitolio Nacional de Colombia. Bogotá, Instituto Colombiano de Cultura Hispánica, 1998, p. 68.