peligro
No puedo dar mi nombre porque, si lo doy, él me encuentra. Soy ‘Libélula Roja’. Ese es mi apodo en internet, con el que el año pasado atendí a las miles de víctimas (5.086, para ser exacta) de engaños amorosos a través de la red, como consejera de la organización Romance Scams (Estafas de Romance) en Estados Unidos. Por cierto, yo fui una de ellas.