Impuestos
PODRÍA DECIRSE que es una tradición colombiana, tan afincada en las costumbres nacionales como ciertas celebraciones o usanzas. Se trata de la práctica de presentar una propuesta de reforma tributaria cada 18 meses en promedio, algo que viene ocurriendo desde hace más de tres décadas en el Congreso de Colombia.
Un aumento de 3 puntos en el IVA, mayores gravámenes a la tecnología y el impuesto a la gasolina, entre otros recaudos que incorporó la reforma tributaria, tienen en vilo a los colombianos en materia económica este año. Por tal motivo le pedimos a la exministra Cecilia López que nos escribiera un artículo sobre el impacto de estos cambios económicos en los bolsillos de los colombianos, tanto en los que están vacíos como en los que andan llenos.
Apenas se habían comenzado a cantar los villancicos en la Navidad pasada, cuando el Gobierno expidió, como siempre por la época, el decreto que fijó el calendario para uno de los temas de los que no escapa nadie: los impuestos del 2014, que corresponden a lo que la gente registró en materia de ingresos y rentas en el año anterior, ratificando la cruda pero cierta máxima de Benjamín Franklin: “En este mundo no hay nada cierto, salvo la muerte y los impuestos”.