El caso del medallón de Magdalena Ortega de Nariño
En 1995, Carmen Ortega Ricaurte, en ese entonces directora del Museo del 20 de Julio (ahora Museo de la Independencia), causó gran controversia al afirmar, ante la Sociedad Nariñista, que Magdalena Ortega le había sido infiel a su esposo, Antonio Nariño, con Jorge Tadeo Lozano. Su hipótesis estaba sustentada en el cuadro de una dama del siglo XVIII que se encuentra en el citado Museo y a quien se le había atribuido la identidad de Magdalena. Luego de un proceso de restauración llevado a cabo en 1973, se descubrió que antes había sido intervenida y sobre su pecho se había pintado un pañolón negro que ocultaba el medallón. De vuelta a su forma original, se observa una figura femenina adornada con un medallón que dejaba entrever un retrato y en su regazo sostenía un niño de brazos. Carmen Ortega afirmaba que el del medallón no era Nariño sino Lozano y que la criatura era hijo de este, pues Nariño para ese entonces estaba encarcelado.
Distintos columnistas e interesados en la historia alzaron una voz de protesta en los periódicos de circulación nacional, calificando de precipitadas e inadecuadas las conclusiones de la investigadora. Otras personas llevaron la situación al extremo y amenazaron con levantar una denuncia por calumnia histórica contra ella. También hubo voces de apoyo que manifestaron la total aceptación de la infidelidad de Magdalena, pues no consideraron un acto agravioso su eventual conducta extramatrimonial sino que, por otro lado, las acusaciones contra la investigación de Carmen Ortega resultaban un tanto machistas. No obstante, la polémica dejó ver que la discusión trascendía el carácter histórico y se entablaba en términos morales, pues la crítica y la defensa se dirigían a reafirmar la imagen de esposa y mujer ejemplar de Magdalena, mas no en verificar la autenticidad del cuadro o su devenir histórico.
Por su parte, la investigadora mantuvo sus argumentos y en el 2000 publicó un libro titulado El enigma del medallón, en donde sustentaba su teoría y hacía frente a las diatribas lanzadas en su contra. Sin embargo, al año siguiente, Felipe Racines Osorio publicó el libro Apología de Magdalena Ortega de Nariño o el fraude del enigma del medallón, con el cual pretendió tumbar la afirmación de Carmen Ortega y dar por concluido el mal entendido. Como podemos ver este sigue siendo un secreto, de los tantos que en cuestiones de romances tiene nuestra historia.