De espectador a jurado en los Golden Globes
LA CINEFILIA
Como muchas personas de mi generación, yo soy un hijo de la televisión. Crecí viendo películas y series de Hollywood que me cautivaban y que asumía como parte de un mundo completamente inaccesible. Aunque nunca he sido fan de las alfombras rojas, sí disfrutaba cada año la transmisión de la ceremonia de los Premios Óscar, en la que los personajes de las películas se transformaban en elegantes actores y actrices que hacían chistes y agradecían su galardón con sus discursos.
En honor a la verdad, la televisión de los ochenta era poco variada en películas y las que alquilábamos en las videotiendas distaban de ser grandes clásicos. Sin embargo, desde muy pequeño me entusiasmé con la oportunidad de asomarme a la ventana del cine para conocer el mundo sin moverme de mi sitio, y muy pronto me enamoré de la experiencia de ir a una sala de proyección para disfrutar y adentrarme en personajes, situaciones y escenarios que quizás nunca habría conocido de otra manera.
En la universidad acompañé mis almuerzos con películas proyectadas en 16 y 35 mm, y esto se convirtió en un ritual imperdible, a pesar de no entender muchas de las historias que vi en la pantalla. Años después, pude dedicarme a transmitir mi amor por el cine a nuevas generaciones sin dejar de visitar la sala de proyección, un espacio en el que puedo estar solo con la pantalla, aun estando acompañado. En mi caso, el ritual de la película siempre debe completarse con el de la escritura, la crítica, la videorreseña o la clase.
La docencia, a su vez, me abrió las puertas al mundo de la crítica y la investigación, y gracias a esto aprendí a ver películas en distintas claves: como espectador, llorando cuando me conmueven y sintiendo empatía por los personajes; como crítico, para enjuiciarlas y compartir sus méritos y debilidades con otros; como curador, para elegir una buena selección y darla a conocer con los espectadores; y como jurado, para exaltar el buen trabajo de un equipo artístico. Estos múltiples roles, que he desempeñado a lo largo de mi vida, me han permitido ver muchas películas a las que pocos tienen acceso y entrenar mi mirada para abordar cada obra desde distintos puntos de vista.
LOS PREMIOS
Desde siempre, Hollywood ha liderado las carteleras cinematográficas de todo el mundo, pero con un predominio arrollador en las últimas tres décadas. La mayoría de las peliculas que llegan a los cines vienen de Estados Unidos y esto ha tenido una profunda influencia en nuestra cultura que, casi sin darse cuenta, ha ido adoptando rituales, costumbres y actitudes similares a las que, desde la ficción, ha construido ese país. Por eso, hace mucho consideramos la calidad de una película o serie de televisión por la cantidad de óscares, Emmy y Globos de Oro que obtengan.
Los premios de Hollywood llevan casi un siglo exaltando sus películas (que tienen alcance global) y, tradicionalmente, lo han hecho desde las entrañas mismas de la industria. Así las cosas, los Academy Awards (nombre oficial de los Óscar) han sido entregados durante 96 años por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood, conformada por anteriores ganadores del premio y representantes de los distintos oficios y profesiones involucradas.
Mientras los Emmy premian la televisión y los Óscar el cine, los Globos de Oro encontraron su lugar en la industria al reconocer productos de ambos medios con la votación de la Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood, compuesta por periodistas de cultura y entretenimiento provenientes de todo el mundo, pero fundamentalmente residenciados allí.
Los tiempos han cambiado y esto ha llevado a que cada premio replantee procedimientos y características para acomodarse a nuevas realidades y generaciones que exigen un mayor compromiso con el respeto por la diversidad y la inclusión de nuevas miradas y apuestas. Los Óscar y Globos de Oro, por ejemplo, han abierto nuevas categorías para incluir a las anteriormente “despreciadas” películas taquilleras como una estrategia para recuperar el público perdido.
Pero entre estos dos eventos, los Globos de Oro fueron los que hicieron la apuesta más arriesgada: sacar los premios de Hollywood para intentar incluir a jurados de todo el mundo. Se quiso que, entre estos últimos, se hicieran presentes periodistas y académicos de los cinco continentes, y se buscaron llegar a personas de todas las razas, credos y orientaciones sexuales, con el objetivo de constituir un jurado más amplio e incluyente del mundo del entretenimiento y la cultura.
LOS NUEVOS GLOBOS DE ORO
El año pasado recibí una llamada muy especial de mi amiga Erica Acuña, quien entonces se desempeñaba como presidenta del Círculo Bogotano de Críticos de Cine. Ellos habían recibido una invitación por parte de la Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood para que nuevos miembros hicieran parte del grupo internacional de votantes: los que elegirían a los nominados y ganadores en cada una de las categorías de cine y televisión de los premios. Ante el ofrecimiento de Erica, no quise perder la oportunidad y participé sin tener grandes expectativas. En mayo de 2023, recibí un correo de parte del presidente de los Golden Globes Awards en el que me notificaba sobre mi elección como nuevo miembro votante internacional. Ese día inició un viaje muy interesante en el que he podido vivir la ‘tras escena’ de estos importantes premios.
En 2023 tuve acceso a más de 200 películas provenientes de todo el mundo, a ruedas de prensa con actores, directores, músicos y productores de la industria y hasta recibí en mi casa películas y material proveniente de los grandes estudios de Hollywood. Ser parte de este evento es algo que nunca consideré y que solo fue posible gracias a la apertura de los premios al mundo. Representar al país, acceder a material exclusivo con anticipación y conversar con grandes personalidades del cine son enormes oportunidades para un profesor que, como yo, busca estar a la vanguardia de lo que ocurre en el mundo del cine para compartir con sus alumnos y con las redes sociales, lo que vengo consolidando desde hace seis años bajo la marca “Amigos del cine”.
A finales de 2023 se dio un giro de tuerca interesante cuando la empresa Dick Clark Productions asumió el control de los Golden Globes Awards y planteó nuevas dinámicas y reglas, acordadas con los anteriores gestores. Esto implicó un nuevo proceso de selección para 2024 y una convocatoria mucho más amplia para que cualquier periodista, crítico o académico del mundo pudiera aspirar a ser parte de este selecto jurado. Aunque fue un proceso mucho más exigente, felizmente fui elegido de nuevo, junto con otros tres colegas colombianos.
La organización de los premios terminó eligiendo cerca de 300 jurados, dentro y fuera de Hollywood, representando 85 países de los cinco continentes. Desde junio hemos tenido reuniones, ruedas de prensa y funciones virtuales o presenciales, y acceso a una plataforma privada en la que, con protocolos de seguridad y acuerdos de confidencialidad, podemos ver las películas para ir organizando nuestras favoritas en cada categoría. En diciembre se hará la elección de los nominados por cada categoría y en enero votaremos por los ganadores
en un proceso confidencial y riguroso.
Es un honor y una gran alegría estar de nuevo en este espacio ofreciendo mi mirada y mi criterio para exaltar lo mejor del cine mundial; procurando elegir películas de alta calidad, con mayor diversidad de historias y personajes, y conectadas con problemáticas actuales.
* Docente investigador y director del programa de Comunicación Audiovisual y Multimedios de la Universidad de La Sabana. Doctor en comunicación y autor de siete libros sobre cine, comunicación y cultura. Votante internacional de los Golden Globes Awards.