El río que se robaron

La mortalidad humana, principalmente de niños (más de siete mil), obedece fundamentalmente al represamiento del río Ranchería, única fuente importante de agua dulce en el desierto de La Guajira. En contra de la moral y de la ley, el agua ahora únicamente se utiliza para surtir grandes haciendas y la explotación de carbón de El Cerrejón, acción que está matando la sed de la nación wayúu. El documental podrá verse en una avant premiere el próximo jueves, 4 de agosto, a las 6:30 p.m. en la Sala fundadores de la Universidad Central.

Este documental fue la prueba principal en la que se basó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para dictar medidas cautelares en defensa de la nación indígena Wayúu, lo que obliga a abrir las compuertas de la represa para que el agua vuelva a correr por el lecho seco y desértico del río.

Esta es la principal causa de la escasez de agua para consumo humano en La Guajira: el aprovechamiento de este recurso en las labores industriales cuyo costo es la vida de seres humanos de una nación ancestral.

Esto es lo que el documental demuestra de forma fehaciente. Su contundencia ha servidopara que la justicia actúe en favor de la comunidad Wayúu, no solo a nivel internacional sino que una tutela fallada el pasado viernes por la Sala penal del Tribunal Superior de Bogotá ratifica la sentencia incumplida de la Comisión Interamericana y exige acatarla. Se trata de una pieza audiovisual valiosa, pues su denuncia no se queda solo en el plano testimonial sino que se convierte en una cción real que permite la justicia.