Pansexuales: más allá del género
Como energía y deseo fue definida la palabra ‘pansexual’ por Sigmund Freud hace más de cien años. Pero pasó todo ese tiempo para que resucitara el término. Aunque no está aceptado por la Real Academia Española (RAE), se define a la pansexualidad como la “tendencia a encontrar en toda conducta una motivación sexual”. Ser pansexual no es lo mismo que ser bisexual.
Acostumbrados a lo binario, para entender el término, el médico Fernando Rosero Mera, experto en salud sexual, afirma que es necesario comprender primero las diferencias que existen respecto a sexo, género, rol de género e identidad de género. La primera es definida por la condición orgánica que tenemos al nacer; la segunda, a una construcción social en la que navegamos entre lo femenino y lo masculino; la tercera, al papel que un individuo toma frente a la sociedad para mostrarse como masculino o femenino, y la cuarta responde a la manera en la que ese individuo se identifica, algo que este especialista define como “sexo mental”. “Esto hace relación al individuo, pero cuando este se empieza a interrelacionar aparecen los gustos hacia las diferentes personas. Cuando la orientación romántica es hacia una persona del mismo sexo, es homosexualidad; si es del sexo contrario, heterosexualidad. Y en medio de esa línea –si se entiende a la sexualidad como una línea– puede aparecer la pansexualidad. Son personas a quienes les gusta tanto los hombres como las mujeres y los intersexuales”, afirma Rosero Mera.
Sin embargo, los medios de comunicación han confundido esta orientación con la misma que define a los bisexuales. La diferencia entre el bisexual y el pansexual es clara. El primero no se enamora del intersexual, él sí necesita una característica. Al bisexual, una persona indeterminada no le interesa porque necesita ciertas particularidades, ya sea de hombres o de mujeres. Por el contrario, el pansexual tiene relaciones amorosas y sentimentales con las personas que se definen como hombres, como mujeres y como intersexuales, entendiendo a la intersexualidad como esa ambigüedad que está en los sexos, como ser hermafrodita, por ejemplo.
A un pansexual le interesan todas esas variedades, incluso esos grupos que no se pueden definir como hombre o como mujer y que serían andróginos. El pansexual se fija en los atributos independientemente de sus genitales. El pansexual no discrimina entre hombre y mujer.
De freud al siglo XXI
En los últimos años, romper la frontera de la sexualidad se ha convertido en un mito cada vez menos fuerte. Y aunque hasta hace un par de meses poco se hablaba del término, las celebridades lo pusieron en la ‘mira’ de internet. El diccionario on line Merriam-Webster indicó que las búsquedas de la palabra ‘pansexual’ en su sitio web habían aumentado en 11.000%. En una entrevista a la cantante, actriz y productora estadounidense Janelle Monáe para la revista Rolling Stone, esta habló con propiedad sobre el tema. Aseguró que después de haber leído cientos de definiciones e investigado mucho pudo identificarse con esta condición. La cantante y actriz Miley Cyrus se refirió al tema en una entrevista publicada en la revista Elle UK, en la que confesó: “Soy muy abierta al respecto… Soy pansexual”. Con estas declaraciones, Monáe y Cyrus se unieron a Lady Gaga, Angelina Jolie, Michelle Rodriguez, Vanessa Carlton y a otras celebridades que han defendido su atracción sexual más allá del sexo o el género.
Rosa, amarillo y azul
El 28 de junio se celebró el Día Internacional del Orgullo LGBT, y aunque en el mundo entero ondearon banderas con los colores típicos de la comunidad (rojo, naranja, amarillo, verde, azul y violeta, que reproducen el orden La bandera pansexual se ha encontrado en diversos sitios de internet desde mediados de 2010. de los colores del arcoíris), también aparecieron algunas con tres colores característicos: rosa, amarillo y azul, que pusieron en el mapa a los pansexuales. Los tres colores representan a aquellos que se identifican con el género femenino (el rosa), el masculino (el azul) y a las identidades no binarias (amarillo). Colores, formas de amar, expresiones románticas, hombres, mujeres, intersexuales, hermafroditas. Todos hacen parte de este nuevo mundo de la pansexualidad. Y aunque sea confuso entenderlo, incluso para los estudiosos del tema, “existen tantas sexualidades como personas en el mundo. Por tanto, no podemos decir que existe una única sexualidad o que esto sea binario de entrada”, asegura Rosero Mera.
*Publicado en la edición impresa de julio de 2018.